Publicaciones en Amics del Pa�s

Libertad y Seguridad

Eva Garrell Zulueta
Art�culos
Data: 18/08/2007
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La libertad fue el pilar de las sociedades industrializadas despu�s de la Segunda Guerra Mundial; Sin embargo, a ra�z de los atentados del once de setiembre en Estados Unidos la seguridad es ahora el principal temor y objetivo, tanto del gobierno estadounidense como de la mayor�a de gobiernos europeos. La relaci�n negativa que existe en la actualidad entre seguridad y libertad, cuanto m�s seguridad menos libertad, influye tanto en la movilidad como en el modelo jur�dico de los Estados, ya que son ellos los garantes de la libertad y los derechos fundamentales. Aun as�, el modelo jur�dico expresa los valores de la sociedad y por ello existen divergencias entre todos los pa�ses que forman parte de la esfera internacional, unas diferencias no menores y que exigen su an�lisis para comprender las din�micas y posiciones a menudo divergentes entre pa�ses, [link para acceder al estudio comparativo del modelo jur�dico norteamericano y los de la U.E. ].

Estados Unidos y la Uni�n Europea representan el mundo occidental, cuyo peso en las relaciones internacionales decrece ante la emergencia de dos grandes competidores: India y China, desplazando la centralidad geoecomonia al este. La guerra de Iraq del 2003 supuso una gran fractura en las relaciones diplom�ticas entre Estados Unidos y la Uni�n Europea. Una separaci�n dif�cilmente admisible en el contexto internacional y los problemas que afecta a la humanidad, por eso movimientos de acercamiento ya se han producido entre Alemania y Estados Unidos y m�s recientemente entre Francia, con el presidente Nicol�s Sarkozy y su pol�tica pro estadounidense, y los Estados Unidos. Este acercamiento es posible gracias a la similitud entre ambas culturas y la importancia que supone, m�s all� de los negocios, la gran fuerza que tendr�a una uni�n entre Estados Unidos y la Uni�n Europea en su conjunto.

Grandes cambios se han producido en las relaciones internacionales y este fuerte movimiento a favor de una mayor seguridad, aun a riesgo de suponer la p�rdida de ciertas libertades del ciudadano, influye en los modelos jur�dicos. Los Estados Unidos como primera potencia mundial y la Uni�n Europea como una de las organizaciones internacionales m�s importantes y avanzadas son puntos de referencia a estudiar, por ello ser�a importante observar los valores que inspiran sus marcos constitucionales, con la finalidad de identificar los aspectos donde fundamentar un nuevo impulso de cooperaci�n, que no excluya a naciones, y se avance en un modelo que haga posible el incremento de los organismos supranacionales que garanticen el progreso universal, una �rea donde Estados Unidos y La Uni�n Europea tienen una especial responsabilidad. Ambos tienden a un modelo federal, ya que es la forma m�s eficiente en la Uni�n de Estados; sin embargo, la cuesti�n de las libertades es un gran punto de discrepancia entre ambos modelos. En la Uni�n Europea, la uni�n pol�tica es a�n un objetivo auspiciado por todo el movimiento integrador. Su expresi�n aparece en los objetivos del Tratado de la Uni�n Europea y el fallido Tratado por el cual se establec�a una Constituci�n por Europa. Sin embargo, en Estados Unidos aparece en su Constituci�n en la declaraci�n de Bill of Rights de 1791, las diez primeras Enmiendas.

Europa necesita ser m�s fuerte y m�s ambiciosa en su proyecto, desde el tratado de Niza existe la integraci�n diferenciada, as� que aquellos pa�ses que la integraci�n les suponga un mayor esfuerzo o temor pueden deshacerse y aquellos m�s ambiciosos que observan los retos de la globalizaci�n y los retos que supone dos gigantes como China e India deben sufragar la gran crisis existente. Estados Unidos, por su parte, debe entender que aunque sea la primera potencia internacional no puede actuar sola en el conjunto de las relaciones internacionales y necesita la Uni�n Europea como punto de apoyo en los cambios de la polarizaci�n del poder.

Sin duda, ambos lados del continente se encuentran en un punto de inflexi�n, donde es necesario encontrar su rol en el siglo veintiuno, considerando las din�micas de los pa�ses emergentes y la globalizaci�n, que evitando exclusiones, exige cambios significativos donde la cooperaci�n es requerida. Sin embargo, en un contexto competitivo, las discrepancias les alejan cuando ahora, m�s que nunca, los grandes retos exigen cooperar en la seguridad colectiva, sin menoscabo de las libertades.

Eva Garrell Zulueta

Estudiante de Ciencias Pol�ticas (UPF)
Asociada al Cercle per al Coneixement
Agost 2007